viernes, 30 de enero de 2009

Norah y el tiempo

Norah Jones canta su canción,
mientras el reloj devora mi mañana laboral.
Intenta distraerme de mis obligaciones "urgentes".
Lo hace por que sabe que tendrá éxito.
que me acordaré de vos, pidiéndome que la pase otra vez.
Y, en eso, buscaré con el cursor la página virgen del monitor,
intentando escribirte lo que me inspira esa canción.
El tiempo sigue apurando y, en verdad, no me puedo demorar.
Pero creo que al menos, un segundo, vale la pena esperar.
Sonreir solo en mi oficina y pensar en tus muecas divertidas.
En tu piel de porcelana y gestos de enamorada.
El reloj no le da tregua a nadie,
pero creo que el mundo no va a explotar
si me detengo solo un segundo a decirte que soy feliz,
Y que te amo de la única forma que es posible.

jueves, 22 de enero de 2009

Super Totó

Tomás es un toro. “Tiene una moral de acero” dicen por ahí. Me descoloca permanentemente: te desafía desde su metro diez con ojos firmes pero después se acuesta con vos a ver tele y te hace “mimitos” mientras se duerme. El poder de convencimiento.

Su único ídolo es la misma persona con la cual compite todo el tiempo, quien además ejerce el papel de mejor amigo, maestro, tutor y enemigo acérrimo. Me hace acordar a mi mismo cuando perseguía a mi hermano por todo el barrio.

Tomás me dan ganas de ser padre, y que mis hijos sean como él (calculo que “Pedrito” no se le va a diferenciar mucho). Me sigue doliendo no poder decirle “ahijado” aunque las palabras después me lo reconocieran. Igualmente, hoy solo sería un título.

A él le escribo entonces – para cuando aprenda a leer y el sur me reciba con sus vientos – que será un placer seguir teniéndole el “si fácil”.

miércoles, 21 de enero de 2009

Chapas (Poesía Criolla)

El canto oxidado del cuchillo olvidado
disfruta del filo renovado dado en verano.
Y en las tierras del sur ha encontrado,
lo que hasta ayer parecía haber olvidado.

Reyertas relegadas salieron al cruce,
como si fueran mosca detrás del dulce.
La chaira reluciente le saca provecho,
aunque, a veces, necesite un sortilegio.

Sin poesía y con poca elegancia,
la fiesta se fue armando sola.
Las noches de playa movían la cola,
Y a los gritos la luna mostraba la hilacha.

Si bien las rimas no son fuerte del remitente,
Estas palabras las escucha quien las entiende.
Me pone contento su masculina entrega,
Chapas bien clavadas, nunca se vuelan.

martes, 20 de enero de 2009

Romance del Malevo

Yo no atrancaba la puerta
de mi rancho ni durmiendo...
para que?... si al lao de ajuera,
por malo que juece el tiempo
la enrrejaba de colmillos,
el coraje de mi perro

Cimarrón, medio atigrao
lo hallé perdido en las sierras,
boquiando de agusanao
malo como manga é piedra,
tuve que traerlo enlazao
pa' curarle las bicheras

Y ahí se quedó aquerenciao
compañero de horas lerdas
trotiando abajo el estribo
ni calculaba las leguas
y en donde aflojaba cincha...
se echaba a cuidar mis priendas.

Eso si... muy delicao
manosearlo ni le cuento
se ponía de ojo extraviao
y se le erizaba el pelo
con que tenia bien ganao
su apelativo....... ”El Malevo”

Que animal capacitao
pa'l trabajo en campo abierto
había que verlo al mentao
trajinando en un rodeo
de ser cristiano clavao
que era dotor ese perro.

¿yo echar tropilla al corral?
le chiflaba entre los dedos
Y embretao en el chiflido
Me los traíba clina al viento
Y era un abrojo priendido
A los garrones del trueno.

Una vez bandeando tropa
con mucha agua en el Río Negro
caí quebrao de un apretón
entre un remolino é cuernos
y me gano la mollera
la oscuridad y el silencio.

cuando volví a abrir los ojos
cruzaba una nube el cielo
gemidos y lambetazos
llegaban como de lejos
redepente compriendí
medio me senté en el suelo
para entregarle las gracias
“hermano de ésta te quedo debiendo”
no me halla ni el pan bendito
si no me sacas “Malevo”
y una inmensa gratitud
se me atracó en el garguero.

Gueno, la cosa pasó
yo dentre pa'l casamiento
hice el horno, la cocina...
mi rancho estiró un alero
y en su chúcara clinera
charqueó el arroró y el rezo

A los dos años
gateaba mi gurí sobre un peleo
o andaba por el guardapatio
priendido a la cruz del perro
ah!! porque él me le sacó
las cosquillas al Malevo.

Lo habrá tomao por cachorro
de su cría el pendenciero
le soportaba imprudencias
se priestaba pa' sus juegos
y ande amenazaba caerse
se le echaba bajo el cuerpo.

La cosa jue tan de golpe
que hasta me parece cuento
fue después de un mediodía
como pa' fines de eneroy
o me había echao en el catrepa'
descabezar un sueño

La patrona trajinaba
prosiando con el borrego
y un redepente aquel grito
como de terror ¡ROSENDOOO!
Y ya me pelé pa'l patio
Manotiando un caronero.

Ella estaba contra el horno
Tartamudeando en silencio
Tenía el guricito alzao
tembloroso contra el pecho
y avanzando agazapao
como una fiera... mi perro.

Enseñaba unos colmillos como puñales
los pelos se le habían puesto de un modo
que costaba conocerlo
y en la brasa de sus ojos
se habían quemao los recuerdos.

De un salto me le puse en frente
le pegue el grito ¡MALEVO!
Le vi soltar una baba
Esta rabioso ROSENDO!
No te me acerques hermano
No te me acerques hermano
Echa pa' tras...
echa pa' tras¡ Fuera perro !!!

Redepente me saltó
ladié pa' un costao el cuerpo
y sentí como la mano
le topaba contra el pecho
y cayó casi sin ruido
como una jerga en el suelo.

cuando lo miré los ojos
se le habían puesto muy guenos
como dándome la gracias
se le acortaba el resuello
se arrastró .... lamió mis pieces
y me broto un lagrimeo.

No tenía pa' elegir
hermano tabas enfermo
fue por el cachorro sabes?
de no, no lo hubiera hecho !!
meneo la cola una vez, dos veces...
y quedó muerto.

Por eso es que desde entonces
no me gusta tener perro
y cuando voy de a caballo
me parece que lo siento
seguir abajo el estribo
trote y trote por el tiempo.

Al recuerdo de mi amigo la Tota Rojo.

lunes, 19 de enero de 2009

Hablar es mentir

Hablar es mentir. La verdad se refleja en las cosas y sus esencias. La realidad esta en los mismos hechos que nos describen. Las intenciones se cuelan en las acciones de los hombres y no detrás del prisma de las letras. Las voces se distorsionan con el espacio, los ruidos y los intereses. Hablar es mentir.

sábado, 17 de enero de 2009

Sur

La cuenta regresiva de estas vacaciones esta llegando a su punto cero. Mañana es día de petates, bolsas y bolsos.

El inventario culinario dirá que se hizo un lechón, un salmón y varias pizzas caseras al horno de barro; un cordero a la parrilla, brochettes de langostinos y varios asados; y una cazuela de mariscos, rabas y un pollo al disco, entre otras cuestiones menores.

Fueron 19 días netos. La mayoría de ellos comenzados en el dúplex de la playa. Continuamente pensaba en que tenía que escribir algo en este blog y que el material era bueno. El mar y la naturaleza, mi familia o la petisa, regalaban inspiración. Lo cierto es que los minutos contados delante del teclado eran escasos y acelerados. Siempre había algo mejor para hacer en ese momento. Algunas cosas quizás tengan la chance de ver la luz en este espacio en los días venideros.

Sin embargo, por breve que sea, puedo decir lo mejor que me dejó este verano: confirmar que este es mi lugar. Esta es mi tierra. De aquí soy y algún día volveré, definitivamente. No se cuando. O mejor si y me lo guardo.

No es para que mis conocidos empiecen a suponer finales. Solo saber, y entender, que aquí el viento sopla distinto para mi. Que el sol me quema de otra manera y el mar me suele contar sus cosas, además de escucharme con atención. Acá están mis raíces: se conservan en todas las esquinas con mis anécdotas. Se reflejan en las miradas de mis viejos y el plan que tengo para su vejez. Acá es donde veré a mis sobrinos hacerse hombres y, quizás, seguir un camino como el mío.
Pero por sobre todo, acá es donde mis hijos correrán descalzos. Donde salgan sin controles exagerados. Acá es donde todo pasará en adelante y la historia será interesante. La felicidad tiene domicilio en la Patagonia.
Espero me perdonen los amigos mas cercanos – mi única pérdida - y aquellos que me asignan otros planes. Hoy, para mañana, los tengo distintos. Hoy, sin ánimos de irme, ya tengo resuelto volver.

lunes, 5 de enero de 2009

Rebelde

"¿Y a vos quién te hizo jefe?" (Totó, sobrino, 5 años).

Elogio

"Fue el mejor asado que comí en mi vida..." (mi vieja).

viernes, 2 de enero de 2009

Mirada

El viejo apunta, como propuesta jocosa, que vaya anotanto todas las cosas que no están saliendo bien o, por lo menos, que no son del todo prolijas en la reunión del primero a la noche. Pide también que cuente en el “bloj” algunas “anedas” desafortunadas de la familia, como por ejemplo, la explosión del extractor de aire el día que la petisa fue por primera vez a comer a casa.
Pero miro a mi alrededor y veo a mi hermano cocinándonos por primera vez. Veo a la familia toda reunida con ánimos que hace tiempo no había. Veo el patio nuevo y una noche bajo la parra que será el combustible del año entrante. Los chicos, cada vez mas grandes, que hinchan las pelotas por toda la casa. Mi vieja bailando la cumbia noventosa.
No se, viejo que decirte. Perdoname que te defraude. Me parece que el apunte pasó por otro lado. Igual creo que vos lo sabés: cuando la gente se disipa, tu sonrisa no habla de errores jocosos sino de pequeños placeres de la vida y la familia.

jueves, 1 de enero de 2009

Lechón, humo y terracota

Cuatro caballeros, tres de ellos muñidos de copas de champagne y habanos castristas. Tocan temas de conversación que no serán recordados en la mañana, en una noche de luces en el cielo y ruido en el corazón. A pasos, el horno envolvente de estreno con el patio, muestra los restos del Schwainebraten de año nuevo. Reunión masculina en el patio terracota. Expedito mira a unos metros, prometiendo otro año de acompañamiento. El pequeño Toto pregunta que es “eso que tira tanto humo” y Matías pide que se lo saquen de la cara.

La vieja pega un par de gritos, reprochando el apartado masculino. Todos apuran el apague de los cigarros, para entrar rápido al living y seguir persiguiendo garrapiñadas, preguntando si la anterior fue la última botella.

Que el 2009 lo cierren con objetivos cumplidos y promesas renovadas.